POR JUNIOR PEÑA
La revolución de abril de 1965, fue un movimiento cívico-militar
que se caracterizó por la participación activa, militante y armada de las masas
populares, con la finalidad de volver al gobierno legítimo y constitucional de
Juan Bosch. En ella se produjo una alianza de clases, ente sectores de la
burguesía urbana y amplios sectores de los trabajadores y obreros.
Esencialmente fue una revolución democrática, en el sentido de que la misma no
perseguía, como maliciosamente argumentaron los norteamericanos, establecer un
régimen socialista o comunista. En realidad, el control de la revolución
políticamente hablando, estaba en manos del Partido Revolucionario Dominicano,
a pesar de la presencia de los partidos de izquierda, como el 14 de junio, el
P.C.D., el M.P.D., y otros. Asimismo, el control militar, de la misma estaba en
manos principalmente de los militares y oficiales a cuya cabeza se encontraba
el coronel Caamaño, quien naturalmente no era en esos momentos, comunista ni
nada parecido. Asimismo, fue una revolución popular en cuanto a sus bases
sociales.
Una característica de la revolución de abril fue que la
misma estuvo localizada, concentrada en la ciudad de Santo Domingo. Es decir,
que la misma no se expandió hacia los pueblos del interior del país contrario,
muchos revolucionarios y personas simpatizantes del gobierno de Bosch, llegaron
del interior a la capital, para participar en los eventos.
Lo anterior significo, que los conspiradores tanto balagueristas-trujillistas
como los del Partido Revolucionario Dominicano, jamás pensaron en organizar una
revolución popular nacional, para derrotar al triunvirato: se sobre entendía,
que se trataba de un simple golpe de estado. Pero, tal y como dijimos
anteriormente las contradicciones provocadas a la hora de decidir, la forma de
sustitución el derrocado gobierno, motivaron la conversión de la conspiración,
en una formidable insurrección popular, a favor del regreso de Bosch al poder
sin elecciones.
Ahora, la forma de organización política y militar que se estableció en el
bando constitucionalista, fueron los llamados comando. Estos estaban integrados
por civiles armados y militares constitucionalistas, y fulgían como órgano de
poder, lo mismo operaban en diferentes zonas geográficas controladas por los
partidos dl regreso de Bosch sin elecciones. Desde el punto de vista de su
composición social, los comandos estaban conformados por sectores pequeños
burgueses y obreros sumamente radicalizados.
Por supuesto, antes que los comandos constitucionalistas estaban subordinados
militar y políticamente a la dirección burguesa populista del Partido
Revolucionario Dominicano, y alto mando constitucionalistas a cuya cabeza se
encontraba el coronel Caamaño, quien además fue elegido presidente de la
República en base a una sugerencia y con la aprobación del profesor Juan Bosch.
Sin embargo, tal subordinación no implicaba, naturalmente, que los comandos
representaban un auténtico poder popular. De forma pues, que la base de
sustentación del gobierno constitucionalista, eran los sectores militares, la
burguesía populista, la pequeña burguesía radicalizada, sectores obreros y
sindicales.
CAUSAS DE LA REVOLUCIÓN DE ABRIL DEL 1965:
Bosch y Balaguer organizaron una conspiración cívica militar, en la cual
militares jóvenes, y de baja graduación, vinculados al Partido Revolucionario
Dominicano, pero con una conciencia democrática y constitucionalista, se
unieron con militares trujillistas-balagueristas como el llamado Clan de San
Cristóbal, encabezado por Ney Nivar Seijas, y que respondía al liderazgo del
Dr. Balaguer. La conspiración fue desvelada, el 24 de abril de 1965, pero
simplemente ya era muy tarde para READ Cabral, el cual fue apresado por
oficiales que horas antes, lo apoyaban. En esta coyuntura, se aceleran las
discusiones y negociaciones entre los bandos militares que coadyuvaron al
derrocamiento del gobierno.
La contradicción surgió precisamente, porque los militares
trujillistas-balagueristas, desconocieron los acuerdos políticos, y se negaron
a aceptar el gobierno de Bosch, sin elecciones, precisamente esas descendencias
fueron la causa principal para que un golpe de estado, se transformara
rápidamente en una revolución.
HECHOS PRINCIPALES DE LA REVOLUCION DEL 1965
Los militares jóvenes, encabezado por el coronel Fernández Domínguez, tomaron
la histórica decisión de distribuir armas entre la población civil, miembros de
los Partidos de la Izquierda y del Partido Revolucionario Dominicano; así se
organizaron los llamados comandos, forma de organización militar, propia de las
guerrillas urbanas. La Guerra Civil para el 25 de abril de 1965, era un hecho
indetenible.
Dos bandos enfrentados, los constitucionalistas, cuyo objetivo militar era
destruir al viejo Ejercito Nacional Trujillista, el cual estaba controlado en
su totalidad, por lo militares trujillistas-balagueristas, en cuanto al
objetivo político, se trata simplemente de restablecer el Gobierno de Bosch sin
elecciones.
Un hecho interesante que hay que mencionar, fue la conversación sostenida por
un grupo de militares constitucionalistas, encabezados por Francisco Alberto
Caamaño, con el embajador Norteamericano; a quien se le solicito su mediación,
justamente para evitar la guerra civil. Este sin embargo, se limito a decirles
a los constitucionalistas que se rindieran para evitar males mayores.
Indignados, los militares constitucionalistas se dirigieron de inmediato a la
cabeza del Puente Duarte, pues las tropas de CEFA dirigidas por Wessin y
Wessin, se dirigían al centro de la ciudad con la intención de tomarla y derrotar
a los constitucionalistas.
La batalla del Puente Duarte en la revolución del 1965
La batalla del Puente Duarte fue un de las más sangrientas, pero al final de la misma,
las tropas reaccionarias de Wessin y Wessin fueron derrotadas y obligadas a
volver sobre sus pasos. Fue tan formidable la participación popular, que muy
pronto el aparato militar regular, quedo virtualmente desarticulado por las
acciones militares del pueblo en armas. Fue tomada la fortaleza del Ozama en
donde se encontraba la odiada Policía Nacional, en su versión de los cascos
blancos.
En el momento en que los constitucionalistas, quienes ya había derrotado en
santo domingo a las tropas regulares, se preparaban para el ataque decisivo de
San Isidro, base aérea en donde se encontraban concentradas las tropas del
CEFA, dirigidas por Wessin y Wessin y el general Benoit, estos temerosos,
solicitaron a los Estados Unidos su intervención militar, para evitar un
supuesto peligro comunista.